Tuesday, August 22, 2006

por su propio peso

La temática en las cajas del post anterior versa sobre un tema más grueso que votar nulo por diputados en el 06’: La obligatoriedad del voto, su utilidad y su consecuencias.

El voto no debe ser obligatorio por que nadie que haga algo por obligación lo toma en serio. Por eso las empresas en la yoni han redescubierto la mística y los japoneses la valoran por sobre todas las cosas, por que sin mística no hay billete. Los trabajadores necesitan sentirse parte de algo, parte de un todo con un fin común, para trabajar de tal manera que los réditos para sus patronos justifique el mantener rodando el negocio.

Y es por eso es que en todos los deportes los jugadores se abrazan y confabulan en silencio antes de un partido. Para fortalecer el espíritu de grupo.

Pero ya sean los japoneses manipulados o los gringos que juegan a ser amigos con terno, la gente solo obra bien cuando obra por pura y dura voluntad propia, sin importar que tan real sea la fuente de esa convicción.

El creer profundamente que lo que haces lo es por el bien tuyo y de los tuyos es la única forma de construir algo sobre una base concreta y real. El resto es cuento paternalista y capitalista de rancio abolengo, el creer que las “grandes mayorías son ignorantes”, “el país no está listo para la democracia”, son herramientas útiles para solapar nuestra triste existencia de medio pelo.

El pueblo es inteligente debido as su continuo afán de supervivencia, lo único que necesitan es una explosión en la cúpula que se los diga. Los únicos que no están listos para la democracia son los dueños de los medios de producción y de prensa, que promueven la cultura de la explotación y la bestialidad respectivamente. Los primeros asfixiando a su gente y lo segundos, salvo un par de excepciones, manteniendo viva la mentira.

El voto debe ser voluntario por que todo debe caer por su propio peso. Nadie debe tener o lograr lo que no se merece. Y nosotros no nos merecemos a la gente que nos toca elegir. Pero esa es la trampa. Que no tenemos otra opción. Que nos subestimamos nosotros mismos, sacrificando un futuro real por mantener viva la mentira momentánea de una supervivencia pendeja, débil y vacía.

No somos nadie por que no nos atrevemos a serlo.

Quizás el Ecuador sea el país más fértil para un verdadero experimento anarquista, prístino, único, genial. Por que el día en que aquí el voto no esté condicionado al carné que te permite conseguir trabajo o salir del país, no vota nadie.

Y solo ese día podremos comenzar a saber y a crear quienes somos. De verdad.

PD: Anoche el triple hijueputa de Álvaro Noboa, en la sarna televisiva conocida con XB, dijo que él “…pasa los fines de semana como cualquier hombre de clase media”. Lo vi con mis propios ojos. No creo que haya nada más que acotar al respecto.